Aire fresco

Conocemos sindicatos "obsoletos" con una actitud temerosa y connivente a la hora de negociar. Que han firmado pactos a lo largo de estos años, que han consistido primordialmente, en la cesión de derechos por parte de los trabajadores, precarizando las condiciones laborales y aplicando medidas cada vez más draconianas. Y también conocemos otros, que no cuajan bajo ninguna sigla, y que al igual que los anteriores, priorizan sus intereses personales a los colectivos.

Sin embargo, existe una alternativa sindical, que no ha traicionado los valores del verdadero sindicalismo: la defensa de los trabajadores.